Ayer se llevó a cabo la expulsión de la usurpadora Mirna Castro (Secretaría de Cultura, Artes y Deportes) de un acto público que pretendía realizar en la Biblioteca Nacional Juan Ramón Molina, en Tegucigalpa.
Los compañeros estudiantes y artistas lograron cerrar el acto. La sinfónica, que interpretaría algunas piezas clásicas, decidió interpretar música bailable y así se armó la fiesta antes que llegara la policía.
La usurpadora Mirna Castro, tuvo que atravesar la pasarella formada por los compañeros que le dijeron en su cara todo lo imaginable, llegando incluso a entregársele personalmente un afiche de la EDUCATÓN "Porque la ignorancia tiene cura, eduquemos a Mirna".
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